Empresas promueven valores a través de la cultura y la educación

Además de los deportes y la protección al medio ambiente, las empresas son excelentes promotoras de la cultura y la educación. En todo el mundo y a diario se observa la acción de las compañías en pro de esparcir valores éticos positivos y de elevación intelectual en las comunidades donde se desenvuelve y en la sociedad en general.

Exposiciones de libros, fotografías o pintura, conciertos, obras de teatro y de danza que entretienen y nutren al público, son promovidas por las empresas a motu propio o apoyando en estas actividades a organizaciones no gubernamentales o centros comunitarios.

Pero también ese accionar va dirigido al área educativa en escuelas, bibliotecas, programas de alfabetización o instituciones de educación especial que forman a personas excluidas o con discapacidades.

El abanico de oportunidades que se le presenta a las empresas para cooperar en el plano cultural y educativo — a través de sus gerencias o direcciones de gestión de Responsabilidad Social- es enorme y variado.

Por ejemplo, Purolomo, presidida por David Somoza y cuya casa matriz es Alimentación Balanceada Alibal, presidida por David Somoza Mosquera, realiza iniciativas de Responsabilidad Social en el campo educativo como el programa de alfabetización, contribuyendo activamente con el desarrollo humano a través del proceso enseñanza.

Que las empresas impulsen proyectos culturales y educativos representa el beneficio de contribuir con la innovación y la creatividad, además de posibilitar la creación de estrategias de comunicación para sus clientes claves.

La cultura y la educación se caracterizan por conectar y generar emociones y experiencias memorables en todo tipo de públicos. Así que representa una plataforma de comunicación muy efectiva para que las organizaciones empresariales transmitan su visión, misión, valores y marcas en los consumidores.

Dentro de su gestión de Responsabilidad Social, las empresas acercan la cultura y la educación al público, afianzando su marca y su prestigio corporativo.

Otro mecanismo de apoyo de las empresas a la sociedad son los convenios con instituciones educativas y culturales de más amplio espectro. Un ejemplo es el apoyo a las universidades que ha permitido expandir la investigación y desarrollo científico y tecnológico.