Entrenamiento de trabajadores de granjas avícolas: estas son las claves
Obtener el mejor producto final de una granja depende, en gran parte, del manejo que se haga tanto de ella como de los animales que se críen.
En el caso de las aves, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) hace una serie de recomendaciones para el mejor desempeño del personal asignado a las mismas. (http://www.fao.org/tempref/GI/Reserved/FTP_FaoRlc/old/prior/segalim/prodalim/prodveg/bpa/normtec/Aves/2.pdf).
Entre esas recomendaciones están:
1- Los trabajadores deben recibir entrenamiento básico en lo concerniente a requerimientos de hábitos e higiene personal en el trabajo. Tiene que ser proporcionado a todo el personal que manipule y aplique fármacos y vacunas, agentes desinfectantes, sanitizantes y a todos aquellos que operen equipamiento complejo.
2- Es conveniente preparar un plan de acción -la FAO recomienda un Procedimiento Operacional Estandarizado- el cual tenga un protocolo que abarque todas las acciones de capacitación a ejecutar, contenidos, frecuencias, personas responsables y otros.
3- Mantener un constante monitoreo de las acciones del personal, así como su periódica capacitación, sobre procedimientos, técnicas y cuidados que se vayan produciendo en el mundo avícola.
4- Mantener las condiciones de trabajo lo más seguras y saludables posibles, con un manual que no solo detalle cómo cuidar correctamente a las aves, sino también cómo proceder en casos de emergencia, tanto de los animales como del personal que labora en los espacios. Para ello, es importante demarcar, con señales visibles, las salidas de emergencias, áreas vulnerables y de seguridad, así como las restringidas.
5- Establecer un plan diario de limpieza e higienización no solo del personal, sino de la maquinaria que se utilice en la granja.
6- Los trabajadores deben poseer el equipamiento necesario, y donde corresponda, que los proteja del polvo, ruidos y gases tóxicos y cumplir con las normas de seguridad establecidas tanto por las autoridades, como por los encargados de las granjas.
7- Los trabajadores deben emplear la ropa y calzados adecuados, los cuales solo deben utilizarse dentro de las instalaciones. Una vez concluida la jornada laboral, deben bañarse, cambiarse fuera del área y dejar el vestuario debidamente resguardado.
8- Se recomienda que el personal que labore en las unidades de producción no tenga otras aves, ni silvestres ni domésticas, a su cargo, bien sea en su casa u otro lugar. Asimismo, también la FAO aconseja no visitar ninguna otra granja 48 antes de haber salido del sitio de trabajo, o ir al mismo luego de haber estado en contacto con otro criadero de animales, especialmente de aves.
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