Indicadores de gestión: una alerta para las compañías
DAVID SOMOZA MOSQUERA
La puesta en práctica de manera correcta de los objetivos estratégicos de las empresas es un punto esencial para alcanzar el éxito. De manera que las compañías deben contar con mecanismos que les permitan analizar si el objetivo fijado se está cumpliendo eficientemente; así como poder detectar a tiempo el error o problema y tomar los correctivos pertinentes.
Es aquí donde los indicadores de gestión entran en el juego como un elemento de acción determinante, ya que en la práctica han demostrado ser de gran utilidad para las empresas.
Su importancia se ha hecho fundamental para las compañías ante la necesidad de contar con mecanismos que permitan prever información de alerta temprana y valorar tendencias relacionadas con las metas establecidas. Y en estos tiempos que corre, cuando aún está la sombra del covid-19, su implementación se hace aún más necesaria
La práctica de los indicadores de gestión está muy relacionada con la filosofía de calidad de gestión creada en Estados Unidos y aplicada en Japón desde mediados de la década de 1950.
Inicialmente, los indicadores de gestión fueron utilizados como herramienta de control de procesos operativos, pero dado su éxito se extendieron a los otros campos corporativos. Actualmente abarcan los procesos administrativos y de desempeño en la misión y objetivos estratégicos de las compañías.
Y es que la métrica de rendimiento modela las condiciones de un proceso o evento en un momento determinado, proporcionando a las compañías una visión panorámica de la situación, del negocio en sí o de las ventas de la, entre otros aspectos.
En ese sentido, los indicadores de gestión pueden ser de eficiencia, eficacia, cumplimiento, evaluación, capacidad, productividad, calidad, rentabilidad, competitividad y valor. Además, deben cumplir con una serie de requisitos como la simplicidad, adecuación, validez en el tiempo, utilidad y oportunidad.
Por ello, resulta indispensable que los indicadores de gestión reflejen datos veraces y fiables, para nada ambiguos, pues ello significaría aplicar una interpretación más complicada y confusa.